La alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Kaja Kallas, quien se ha empeñado en promover la imposición de las sanciones antirrusas, ha cambiado de retórica repentinamente, declarando este miércoles que las sanciones amenazan a la soberanía.
La reciente medida de Estados Unidos contra cinco europeos, a quienes se prohibió la entrada al país norteamericano acusados de promover la censura, no fue del agrado de Kallas. "La decisión de EE.UU. de imponer restricciones de viaje a ciudadanos y funcionarios europeos es inaceptable y es un intento de desafiar nuestra soberanía", escribió en la red social X.
"Europa seguirá defendiendo sus valores: libertad de expresión, reglas digitales justas y el derecho a regular nuestro propio espacio", declaró la jefa de la diplomacia europea.
Doble rasero
Indignada por estas restricciones de viaje a EE.UU., la alta representante de la UE no mostró la misma actitud a la hora de tratar de impedir la entrada en los países europeos a los ciudadanos rusos, empeñándose en privarlos de la posibilidad de obtener visados Schengen de entradas múltiples.
"Se aplicarán normas más estrictas a los ciudadanos rusos que soliciten un visado para viajar a la Unión Europea. Viajar a la Unión Europea y circular libremente dentro de ella es un privilegio, no un derecho", declaró Kallas a principios de noviembre. En aquel entonces, eso no le pareció ningún "intento de desafiar la soberanía" de otro país.
Moscú ha señalado en reiteradas ocasiones que la UE se está perjudicando a sí misma con sus medidas antirrusas. "Al parecer, la Comisión Europea razonó: ¿para qué necesita Europa Occidental turistas solventes cuando hay inmigrantes ilegales que viven de subsidios y ucranianos que evaden el servicio militar?", comentaron desde la Cancillería rusa las restricciones a la emisión de visas Schengen para los ciudadanos rusos.


