Canciller alemán explica las razones de los problemas económicos del país
El canciller de Alemania, Olaf Scholz, atribuyó los problemas económicos que enfrenta su país al debilitamiento de los mercados de exportación y a los altos precios de la energía, e indicó que difícilmente esas dificultades podrán resolverse con la ayuda de préstamos, informan medios locales citando una entrevista publicada este fin de semana en el diario Welt am Sonntag.
Scholz considera exagerado decir que Alemania se encuentra en una crisis económica, asegurando que se trata simplemente de un "bache de crecimiento", cuya la razón principal es la debilidad de los mercados de exportación, especialmente en China. "Esto afecta a una nación exportadora como la nuestra", afirmó, añadiendo que, al mismo tiempo, Alemania debe enfrentarse a una inflación elevada y al aumento de los precios de la energía, unas condiciones que son consecuencia de la situación en Ucrania.
Así mismo, el canciller alemán advirtió que es peligroso considerar la situación como una crisis, ya que existe "toda una serie de buenos momentos", los cuales podrían ser ignorados, como la construcción de grandes plantas de baterías, las inversiones en el desarrollo de electromovilidad y la producción de semiconductores.
En cuanto a la idea de que Alemania se convierta en "el enfermo de Europa" debido a su negativa para reformar la economía del país, el canciller declaró que se niega a asumir deudas adicionales. "Eso no resolvería los problemas, si no que crearía otros nuevos", aseguró. Scholz también considera que la intervención en el mercado podría traer consecuencias no deseadas, por lo que se opone a los programas para estimular la economía.
La Oficina Federal de Estadística de Alemania informó a finales de julio de este año que el PIB que la economía de la nación europea estaba completamente estancada. Se espera que Alemania experimente un descenso del 0,4 %, según las previsiones de la Comisión Europea.