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El Sukhoi Su-35 se exhibirá en vuelo en China en 2014
El consorcio ruso Sukhoi está dispuesto a exhibir al Su-35, el nuevo caza multifuncional de cuarta generación (4++) en 2014 en el salón aeronáutico chino de Zhuhai.
Según Mijaíl Pogosián, el presidente de la Corporación Aeronáutica Unificada de Rusia, que agrupa a fabricantes tan conocidos de aviones como MiG y Sukhoi, se trata de un prototipo que realizará los vuelos de exhibición.
Cabe señalar que el Ministerio de Defensa chino ha mostrado su interés en comprar a Rusia un lote de estos aviones. Hace un año ambos países estaban negociando un contrato de compraventa, pero en abril de este año Rusia suspendió estas negociaciones esgrimiendo su preocupación al respecto de que el país asiático solicitara sólo un pequeño lote de estos aparatos.
Viktor Komardin, el subdirector de la empresa Rosoboronexport, el intermediario ruso de venta de armas, señaló sobre el asunto que la causa de la suspensión del contrato se debe a que la parte rusa no considera que el suministro de pocos aviones le compense económicamente. Sin embargo, fuentes independientes indican que a Rusia también le preocupa que China inicie la producción no autorizada de réplicas de estas aeronaves. No sería la primera vez, ya que, por ejemplo, el avión de caza chino J-10 no es más que la copia del ruso Su-27, mientras que el J-11 es el análogo del Su-30.
De acuerdo con el rotativo ruso 'Kommersant' que citó a una fuente anónima del sector industrial militar ruso, este país estaría dispuesto a vender a China un mínimo de 48 Su-35.
Conocido por su supermaniobrabilidad, la aeronave alcanza una velocidad de 1.400 kilómetros por hora a poca altura, mientras que su velocidad en altitud asciende a 2.400 kilómetros por hora. El techo operativo de la aeronave alcanza los 18.000 metros.
La capacidad de su radar Irbis, el más potente radar de rastreo digital pasivo (PESA) de todos los cazas de este tipo en el mundo, le proporciona al Su-35 la capacidad de detectar objetos en modo aire-aire a más de 400 kilómetros, además de identificar y seguir múltiples blancos a distancias superiores a 80 kilómetros.
El Su-35 modernizado es considerado un caza de la conocida como generación 4++, pero gracias al uso de algunos elementos de la tecnología furtiva capaz de burlar a los radares enemigos (debido al empleo de materiales absorbentes de ondas de radio) en el diseño de su célula, podría considerarse incluso de quinta generación.
La empresa Sukhoi, fabricante de estos aviones, sugiere que el Su-35 supera por el conjunto de sus características al francés Rafale; los estadounidenses F-15 Eagle, F-16 Fighting Falcon, F/A-18E/F Super Hornet y F-35 Lightning II (quinta generación); además de al Typhoon, del consorcio europeo Eurofighter. Por ejemplo, el caza F-35 de quinta generación, de fabricación estadounidense, desarrolla una velocidad máxima de unos 1.900 kilómetros por hora y su techo también es de 18.000 metros.
Cabe señalar que el Ministerio de Defensa chino ha mostrado su interés en comprar a Rusia un lote de estos aviones. Hace un año ambos países estaban negociando un contrato de compraventa, pero en abril de este año Rusia suspendió estas negociaciones esgrimiendo su preocupación al respecto de que el país asiático solicitara sólo un pequeño lote de estos aparatos.
Viktor Komardin, el subdirector de la empresa Rosoboronexport, el intermediario ruso de venta de armas, señaló sobre el asunto que la causa de la suspensión del contrato se debe a que la parte rusa no considera que el suministro de pocos aviones le compense económicamente. Sin embargo, fuentes independientes indican que a Rusia también le preocupa que China inicie la producción no autorizada de réplicas de estas aeronaves. No sería la primera vez, ya que, por ejemplo, el avión de caza chino J-10 no es más que la copia del ruso Su-27, mientras que el J-11 es el análogo del Su-30.
De acuerdo con el rotativo ruso 'Kommersant' que citó a una fuente anónima del sector industrial militar ruso, este país estaría dispuesto a vender a China un mínimo de 48 Su-35.
Conocido por su supermaniobrabilidad, la aeronave alcanza una velocidad de 1.400 kilómetros por hora a poca altura, mientras que su velocidad en altitud asciende a 2.400 kilómetros por hora. El techo operativo de la aeronave alcanza los 18.000 metros.
La capacidad de su radar Irbis, el más potente radar de rastreo digital pasivo (PESA) de todos los cazas de este tipo en el mundo, le proporciona al Su-35 la capacidad de detectar objetos en modo aire-aire a más de 400 kilómetros, además de identificar y seguir múltiples blancos a distancias superiores a 80 kilómetros.
El Su-35 modernizado es considerado un caza de la conocida como generación 4++, pero gracias al uso de algunos elementos de la tecnología furtiva capaz de burlar a los radares enemigos (debido al empleo de materiales absorbentes de ondas de radio) en el diseño de su célula, podría considerarse incluso de quinta generación.
La empresa Sukhoi, fabricante de estos aviones, sugiere que el Su-35 supera por el conjunto de sus características al francés Rafale; los estadounidenses F-15 Eagle, F-16 Fighting Falcon, F/A-18E/F Super Hornet y F-35 Lightning II (quinta generación); además de al Typhoon, del consorcio europeo Eurofighter. Por ejemplo, el caza F-35 de quinta generación, de fabricación estadounidense, desarrolla una velocidad máxima de unos 1.900 kilómetros por hora y su techo también es de 18.000 metros.
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