El pasado de Sarkozy compromete su futuro político a cuatro meses de las presidenciales
Nuevas revelaciones periodísticas vinculan al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, con una presunta malversación de fondos en los años 90. Además, en medio del escandalo, el principal rival de Sarkozy en las presidenciales de 2012, el socialista François Hollande, ha echado leña al fuego responsabilizando directamente al presidente de las consecuencias de la crisis económica.
Fondos ‘demasiado profundos’
Nuevas revelaciones publicadas por el diario 'Liberation' vinculan a Sarkozy con una presunta malversación de fondos relacionada con el pago de comisiones ilegales a Pakistán en la venta de submarinos franceses durante la época en la que fue ministro de Presupuesto, en 1994.
Sarkozy ha sido implicado por primera vez en la investigación del llamado 'Karachigate' por un antiguo alto funcionario del Ministerio de Defensa, que aseguró al juez del caso que el entonces ministro de Presupuestos “necesariamente tuvo que dar su beneplácito para la creación de Heine”. La sociedad Heine era la empresa que recibía las comisiones destinadas a los intermediarios encargados de la venta de armamento.
Según el testigo, Sarkozy habría dado su visto bueno para la creación de una empresa en Luxemburgo encargada de recibir las comisiones destinadas a remunerar a los intermediarios. Se cree que parte de las comisiones pudieron regresar a Francia para sufragar la campaña presidencial de 1995 del exprimer ministro Edouard Balladur, cuyo portavoz era entonces Sarkozy.
Los socialistas piden cuentas a Sarkozy
Los socialistas franceses han pedido a Sarkozy que aclare el papel que desempeñó en el caso Karachi y que se levante el secreto de sumario que pesa sobre los documentos de Defensa relativos a los contratos. “La verdad es un deber del Estado”, declaró este lunes Bernard Cazeneuve, el diputado y portavoz del candidato socialista a las elecciones presidenciales francesas de este año, François Hollande.
“Nosotros pedimos que los papeles que jugaron el primer ministro de la época, Edouard Balladur; su ministro de Defensa, François Léotard, y su ministro del Presupuesto, Nicolas Sarkozy, sean aclarados de una vez”, subrayó.
Asimismo, con motivo de estas acusaciones el Frente Nacional del otro rival de Sarkozy, Jean Marie Le Pen, declaró que estas revelaciones demuestran la existencia de un “sistema Sarkozy”, que mezcla “los conflictos de intereses, la corrupción y la malversación de fondos públicos”.
Hollande: Sarkozy, “presidente de los privilegiados"
Además, el mismo candidato socialista responsabilizó directamente a Sarkozy de las consecuencias de la crisis económica mundial para el país y dijo que el presidente es "incapaz" de encontrar una salida, según un manifiesto de Hollande publicado este martes.
El candidato socialista estima que hay razones globales que explican la crisis, pero que el Jefe del Estado no ha evitado sus consecuencias en Francia. Hollande asegura que "los franceses sufren" y dice que "la depresión económica está ahí, la angustia social está en todas partes y la confianza en ningún lado". Hollande ataca a Sarkozy, a quien califica de "presidente de los privilegiados", y asegura también que el presidente lanza propuestas como la de la creación de una tasa sobre las transacciones financieras "cuya ejecución se le escapa".
Castigar a los presidentes: ¿una nueva tradición gala?
Por su parte, el Palacio del Elíseo calificó como “insidiosos y calumniosos” estos “ataques” contra Sarkozy. “El Gobierno ha descalificado sistemáticamente lo que estaba autorizado a descalificar y ha acompañado a la Justicia de todas las formas posibles para que pueda hacer su trabajo”, afirmó la ministra de Ecología, Nathalie Kosciusko-Morizet, en una entrevista radiofónica.
El ‘Karachigate’ salpica a Sarkozy a menos de cuatro meses antes de las presidenciales. Los analistas han señalado que este caso tiene una vertiente política, ya que los socialistas franceses abren fuego contra Sarkozy en víspera de los comicios, cuya primera vuelta se celebrará en Francia el 22 de abril. La segunda vuelta está prevista para el 6 de mayo.
La implicación de Sarkozy en este escándalo no beneficia en absoluto al presidente galo, que ha comenzado el año electoral con mal pie, ya que las encuestas de popularidad únicamente le otorgan un 34%.
Expertos políticos han destacado que para la Quinta República el año pasado fue muy ‘fructífero’ en lo que respecta a los escándalos relacionados con estadistas pasados o actuales: el caso del ex presidente Jacques Chirac, acusado por corrupción, el del director del FMI y el candidato más posible a la Presidencia, Dominique Strauss-Kahn, y ahora, las acusaciones de unos presuntos delitos de corrupción que salpican al presidente Sarkozy.