Al menos una decena de saharauis se declaran en huelga de hambre en el aeropuerto de Madrid
Alrededor de 40 saharauis llevan decenas de días retenidos en el aeropuerto de Barajas, en la capital española, Madrid. Todos ellos han pedido asilo político al Gobierno de España, pero les ha sido denegado.
Entre ellos se encuentra un matrimonio compuesto por una mujer, Rbab al-Tarad Yahi, y un activista sordomudo y enfermo de cáncer, Ali Hammou, con su hija de año y medio, todos ellos retenidos desde el pasado 9 de septiembre.
Además, Rbab sufrió hace seis días un aborto, lo que motivó su traslado a un hospital, si bien esa misma tarde fue regresada a Barajas en contra de la recomendación médica, según Contramutis. Por su parte, la menor de año y medio se encontraría en mal estado, con heridas en la boca y pérdida de peso.
Hoy el gobierno de Pedro Sánchez me ha impedido realizar mis funciones como representante pública, impidiéndome la entrada en la sala donde están retenidos decenas de activistas saharauis, incluida una niña enferma. No tengo palabras. pic.twitter.com/Wn9EQi8ORj
— Ione Belarra (@ionebelarra) September 23, 2024
Según una de sus abogadas, 29 de los ciudadanos saharauis habían iniciado una huelga de hambre como protesta por su situación, mientras que otras fuentes sostienen que serían 11 los que continúan sin ingerir alimentos. Fuera del aeropuerto también se adhieren a la protesta: la madre de Rbab también se encuentra en huelga de hambre.
Todas las personas retenidas en la sala de inadmitidos del aeropuerto llegaron en diferentes vuelos desde finales del mes de agosto. Todos ellos se identifican como ciudadanos saharauis y como activistas perseguidos por las autoridades de Marruecos.
Sin embargo, el Ministerio del Interior de España asegura que no está constatado que sean saharauis, pues portan documentación marroquí; y que tampoco lo está su activismo prosaharaui.
Deportar a saharauis a Marruecos es cooperar en la política marroquí de vulneración de DDHH. Los deportados les espera cárcel. Un gobierno de coalición progresista debe poner en el centro de sus políticas la legalidad internacional y los derechos humanos. pic.twitter.com/Buewqi3Ewj
— Tesh Sidi🇪🇭 (@teshsidi) September 24, 2024
El lunes la diputada y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, intentó entrar en la sala para comprobar sus condiciones, pero le fue denegado el acceso. Ante los medios de comunicación denunciaron que tanto la madre como la niña de año y medio no habían recibido atención médica .
Además, Belarra afirmó que las condiciones son "insalubres" y no se pueden garantizar los derechos de las personas solicitantes de asilo.
La diputada denunció "la hipocresía" del Gobierno de Pedro Sánchez, por enviar un avión de las fuerzas armadas para traer desde Venezuela a "un ultraderechista violento y peligroso ", en referencia al líder opositor Edmundo González , y sin embargo, no atender las solicitudes. de asilo de activistas saharauis.
También hasta el aeropuerto se desplazó la diputada de origen saharaui, Tesh Sidi, de Sumar, que ha recordado que "el reino de Marruecos está ocupando más del 80 % del territorio del Sáhara Occidental y toda ciudadanía que tiene un saharaui en ese país es una nacionalidad oficial". "No son de origen marroquí, por ende no se les puede deportar a Marruecos", añadió.
Asimismo, Sidi ha hecho referencia a que España es una potencia administradora del Sáhara Occidental, "de iure, aunque no de facto", "debe asumir la responsabilidad de una descolonización pendiente".
Por su parte, el Ministerio del Interior, según información de Público, ha decidido repatriar a diez de estos activistas a Marruecos , mientras que el sábado familiares y simpatizantes de los ciudadanos saharauis se manifestaron frente a la sede del departamento de Interior, en el centro de Madrid.
Bajo el lema, "los saharauis necesitan protección, no deportación", los manifestantes pidieron que se frene el envío a Marruecos de los activistas.
El portavoz del Movimiento por los Presos Políticos Saharauis (MPPS), convocante de la protesta, Luis Portillo, aseguró que no se cumplen las debidas garantías en la tramitación de los expedientes de asilo y que en muchos casos se les asigna interpretas marroquíes que hablan darja en lugar hassanía, el idioma de los saharauis.