El Banco Central de Turquía subió este jueves su principal tipo de interés en 650 puntos básicos, hasta el 15 %, en el marco de un cambio de rumbo de la política de tipos bajos del presidente Recep Tayyip Erdogan, informó Reuters.
"El endurecimiento monetario se reforzará tanto como sea necesario de forma oportuna y gradual hasta que se logre una mejora significativa de las perspectivas de inflación", declaró el comité de política del banco tras aplicar su primera subida desde principios de 2021.
El organismo introdujo esta política "para establecer el rumbo de la desinflación lo antes posible, anclar las expectativas de inflación y controlar el deterioro del comportamiento de los precios".
El significativo aumento desde el actual 8,5 %, el primero en Turquía desde marzo de 2021, tiene lugar tras el nombramiento por Erdogan, después de su victoria electoral, de Mehmet Simsek, execonomista del banco estadounidense Merrill Lynch, como ministro de Finanzas y de Hafize Gaye Erkan, exempleada de Goldman Sachs y First Republic Bank, como gobernadora del banco central.
Tras su victoria electoral el mes pasado con el 52 % de los votos, Erdogan se enfrenta a una crisis del alto coste de vida en el país, agravada en gran medida por la estrategia monetaria, concentrada en combatir la inflación, que actualmente ronda el 40 %, con bajos tipos de interés, escribe Politico.
Desde que asumió el cargo, Erdogan no sugirió posibles cambios en su política financiera, más bien al contrario. "Algunos amigos no deberían cometer el error de pensar que el presidente está llevando a cabo un gran cambio en la política de tipos de interés", declaró la semana pasada. "Hemos trabajado con una teoría de tipos de interés bajos e inflación baja. Sigo trabajando con la misma concepción", agregó.
Dimitar Bechev, experto en Turquía de la Universidad de Oxford y autor de un libro dedicado a la política de Erdogan, expresó a Politico que cualquier cambio en el rumbo político podría durar poco tiempo. "Hemos tenido episodios similares antes", dijo, señalando que el último gobernador del banco central de Turquía que insistió en una subida de tipos fue destituido por el mandatario después de menos de seis meses en el cargo.
La lira perdió un 44 % de su valor en 2021 y un 30 % el año pasado, a pesar de los esfuerzos del Banco Central por contrarrestar la demanda de la divisa con sus reservas.


