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La Iglesia católica de España pagará a partir de ahora dos impuestos de los que estaba exenta
El acuerdo ha sido alcanzado entre el Gobierno de España y la Conferencia Episcopal y se prevé que reporte 16 millones de euros a las arcas públicas.
La Iglesia católica española pagará dos impuestos de los que hasta ahora se encontraba exenta. Se trata del gravamen por contribuciones especiales y el tributo sobre construcciones, instalaciones y obras.
La noticia la ha dado este miércoles el ministro de la presidencia, Félix Bolaños, después de la firma del acuerdo por parte del Gobierno y de la Conferencia Episcopal.
De este modo se pone fin al régimen fiscal privilegiado del que gozaba esta institución desde el año 2001 y que a partir de ahora será el mismo que se aplica al resto de entidades sin ánimo de lucro. "Por eso hoy podemos afirmar que terminan sus privilegios fiscales", ha afirmado Bolaños.
Según los cálculos del Gobierno, se prevé que ingresen alrededor de 16 millones de euros anuales a las arcas públicas con estos nuevos impuestos, que serán recaudados por los ayuntamientos de las 70 diócesis, 23.000 parroquias, y las órdenes y congregaciones religiosas instaladas en el país.
Sin embargo, la Iglesia católica continuará sin pagar tributos como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el de sucesiones, donaciones y transmisiones patrimoniales, el de sociedades o los de donaciones y limosnas, ajustándose al acuerdo suscrito con el Vaticano en 1979.
La equiparación impositiva de la Iglesia es una reclamación histórica de varios colectivos. En 2018, el Gobierno llegó a plantear la posibilidad de modificar los Acuerdos con la Santa Sede para terminar con la exención del IBI de los edificios no dedicados al culto, aunque finalmente no se llegó a llevar a cabo.
Tras un año de discretas negociaciones, el acuerdo se ha sellado en un encuentro entre el Nuncio en España, el arzobispo Bernardito Auza; el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Juan José Omella; y los representantes del Gobierno en la sede del Ministerio de Exteriores.
"El acuerdo se desarrolla en la voluntad compartida entre el Gobierno de España y la Conferencia Episcopal Española de equiparar el régimen fiscal de la Iglesia católica con las entidades sin ánimo de lucro, conforme al principio de no privilegio y no discriminación", dice el comunicado conjunto emitido esta jornada.
Este es el segundo acuerdo alcanzado por el Ejecutivo del presidente Pedro Sánchez con la Iglesia, después del suscrito en enero de 2022, cuando la Conferencia Episcopal reconoció que al menos 1.000 de los 35.000 bienes que inmatriculó –es decir, que inscribió por primera vez en el registro con el obispo como único fedatario– a su nombre de forma extraordinaria desde 1998 no le pertenecían.
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