Bloomberg: Instituciones financieras se preparan para peores escenarios debido a las tensiones en torno a Taiwán
Las instituciones financieras internacionales se están preparando para peores escenarios debido a las tensiones en torno a Taiwán, informó este lunes Bloomberg, remitiéndose a personas familiarizadas con el asunto.
De acuerdo a las fuentes del medio, los prestamistas, incluidos Societe Generale SA, JPMorgan Chase & Co. y UBS Group AG, han pedido a sus empleados que revisen los planes de contingencia para gestionar posibles riesgos. Destacaron también que se dará prioridad a garantizar la seguridad del personal, identificar a clientes que corren riesgo de ser sancionados y desarrollar planes para reducir el riesgo de la contraparte y las posibles pérdidas comerciales.
Mientras tanto, las compañías de seguros mundiales se niegan a suscribir nuevas pólizas para cubrir a aquellas empresas que invierten en China y Taiwán, señala Bloomberg.
La semana pasada, Global Times escribió que "los políticos estadounidenses quieren aumentar la presión para coaccionar a las principales organizaciones financieras de EE.UU. con el fin de que se alejen del mercado chino" y subrayó que cualquier reducción de la presencia en el gigante asiático solo perjudicaría a estas empresas.
- Las tensiones entre Pekín y Washington en torno a Taiwán se han intensificado tras la visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi. En respuesta, China inició ejercicios militares "sin precedentes" a gran escala, así como actividades de entrenamiento, incluidos simulacros con fuego real, en el espacio marítimo y aéreo en seis zonas alrededor de la isla.
- Taiwán se autogobierna con una administración propia desde 1949. Desde entonces, ha conservado la bandera y algunos otros atributos de la antigua República de China que existían en el continente antes de que los comunistas llegaran al poder. Pekín considera a Taiwán como parte irrenunciable de su territorio, y la mayoría de los países, incluida Rusia, reconocen a la isla como parte integral de la República Popular China.