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Revelan que el Ministerio del Interior británico altera los expedientes de solicitantes de asilo para deportarlos a Ruanda
Algunos de los solicitantes detenidos amenazaron con suicidarse, pero pese a ello las autoridades indicaron que los migrantes estaban de acuerdo con ser enviados al país africano.
El Ministerio del Interior del Reino Unido alteró algunos expedientes de solicitantes de asilo, indicando que ellos supuestamente están de acuerdo con ser deportados a Ruanda, incluso después de que algunos amenazaron con suicidarse, informa The Observer, el suplemento dominical del diario The Guardian.
Los registros oficiales revelan que funcionarios del Ministerio del Interior determinaron que un inmigrante afgano indocumentado detenido por las autoridades migratorias británicas "no está en contra" de ser enviado a su país de origen o a Ruanda. Sin embargo, pocos días antes de que se diera a conocer esa conclusión, el solicitante de asilo había amenazado con suicidarse por temor a nunca más volver a ver a sus hijos.
Después de que el ministerio afirmara que el detenido afgano estaba de acuerdo con ser enviado a África, este intentó quitarse la vida en dos ocasiones y la semana pasada volvió a amenazar con suicidarse.
"Está negando la realidad"
Clare Moseley, fundadora de la organización benéfica Care4Calais, que ha atendido a 125 solicitantes de asilo a los que se les ha comunicado que serían deportados a Ruanda, calificó de "cruel" la política migratoria británica.
"Es profundamente impactante que el Ministerio del Interior diga que alguien que está sufriendo una angustia mental extrema, debido al miedo sobre su futuro y el de sus hijos, está de acuerdo con ser trasladado a la fuerza a Ruanda, cuando el alcance de su angustia demuestra lo contrario. El Ministerio del Interior está negando la realidad", denunció Moseley.
La política de enviar solicitantes de asilo a Ruanda, impulsada por la ministra del Interior, Priti Patel, de raíces indias, ha sido descrita por los críticos como "absolutamente vergonzosa" y una de las más perniciosas en la historia reciente del gobernante Partido Conservador británico.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ordenó a las autoridades británicas la cancelación de los dos primeros vuelos que debían llevar a los solicitantes de asilo desde el Reino Unido al país africano, y en septiembre celebrará una audiencia en la que se revisará la política migratoria de Londres. Decenas de solicitantes de asilo fueron detenidos en territorio británico, y tras el fallo de la corte muchos de ellos han sido liberados.
"Nadie será reubicado [en Ruanda] si es inapropiado o inseguro para ellos. Nos tomamos muy en serio el bienestar y la seguridad de las personas a nuestro cuidado […]. También existen sólidas medidas de protección para garantizar que todas las personas a las que atendemos, incluidas las más vulnerables, sean tratadas con dignidad y tengan acceso al apoyo que necesitan", aseguró un portavoz del Ministerio del Interior.
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